"Al visitar Medellín tuvimos la suerte de que nuestro guía fue Óscar, que, además de ser paciente y simpático, supo adaptarse a nuestras necesidades, haciendo el viaje mucho más placentero, ameno y sin prisas.
Seguimos sus recomendaciones y todo fue sobre ruedas. Se agradece que te toque de guía alguien tan cercano, por lo que a día de hoy guardo el recuerdo de que en Medellín, más que llevarnos un guía, nos acompañó un amigo."